Pintar un espacio no es nada nuevo para nadie. Todos hemos cogido alguna vez una brocha y hemos pintado una habitación una y otra vez hasta encontrar un color que nos gusta y entonces nos quedamos satisfechos.
El problema es que la mayor parte de las veces nos ponemos directamente a pensar ¿Qué color elijo? cuando verdaderamente la primera pregunta que deberíamos preguntarnos es ¿Qué queremos pintar?, y no me refiero a que habitación o que espacio, sino a que es lo que queremos pintar en la pared, porque hay muchas opciones, y no sólo existe el pintar una habitación de un color sólido sin más. Aquí te traemos algunas ideas que nos hemos encontrado y que nos encantan, para que tu, al igual que todos nosotros, siempre tengamos inspiración de sobra cuando diseñamos un espacio.
Degradados
La idea es simple, pintar una pared de un color arriba y otro abajo, y conseguir un efecto degradado entre ambos. Hay quienes lo hacen incluso con más colores en una sóla pared. Los resultados que pueden conseguirse con este efecto son muy armoniosos.

Dibujos
En esta categoría incluimos todos los dibujos que se nos puedan ocurrir. Puede ser, como el espacio que hemos puesto de ejemplo, un árbol, pueden ser animales, flores, o cualquier figura que nos guste, y que haga del espacio algo divertido.

Textos
La idea es escribir sobre la pared. Esto sirve muy bien sobre todo en espacios comerciales, tiendas o locales de todo tipo, pero sobre todo en oficinas. Queda muy bien siempre poner el slogan de una empresa o una marca, y textos que vayan de acuerdo a los valores de la organización, porque los transmiten y además los refuerzan.

Para zonificar
La pintura se traduce en colores, y los colores sirven para marcar cosas visualmente. Hacen que un espacio se vea más pequeño o más grande, más alto o más bajo. Y cuando se trata de zonificar, también nos sirven. De la misma forma que una alfombra puede delimitar el espacio dónde empieza y dónde termina un comedor o una zona de salón, la pintura puede hacer lo mismo. Sabiendo esto podemos jugar con ella, y de acuerdo a lo que queramos conseguir, usarla en suelos, techos o paredes, o una combinación de los anteriores.

Figuras geométricas
El hacer figuras geométricas es una de las formas más conocidas de ponernos creativos al pintar paredes. Esto es porque son una forma fácil de imitar al papel pintado, por ejemplo, pero además suelen ser las figuras más fáciles de hacer, sobre todo si las hacemos en casa nosotros mismos, y se obtienen resultados tremendos. Con figuras geométricas el cielo es el límite.

Pared bicolor
Una pared así significa partir la habitación o pared en dos, y pintar una parte (arriba o abajo) de un color distinto al otro. Esto puede hacerse a distintas alturas. Lo más común es hacerlo a 1.20m del suelo, para enmarcar la habitación, pero nos gusta mucho ver ideas en las que se hace diferente. El color más oscuro suele ponerse abajo, pero hay quienes hacen lo contrario. La idea es hacer algo divertido.

El techo
Como una categoría extra incluimos aquí el hecho de pintar el techo, porque suele ser la 5 pared que se nos olvida muchas veces. Ahora, el techo puede pintarse en un color sólido. Se recomienda, por ejemplo, pintar los techos en colores oscuros cuando el espacio es demasiado alto, y queremos “bajarlo” visualmente. Por supuesto que en la mayoría de espacios queremos conseguir que el espacio parezca más alto. Pero esto no quiere decir que no podamos pintar el techo. Siempre podemos hacer figuras en colores claros divertidos. Una idea que es un clásico por ejemplo, es pintar nubes en los techos de niños pequeños, para que vean esto cuando van a dormir y cuando despiertan.

Sabemos que hay muchas más ideas que pueden quedar fenomenal, así que si se te ocurre alguna, ¡compártela con nosotras!